Preguntas Frecuentes

 

¿Es eficaz el tratamiento quirúrgico?

La cantidad real de peso que pierde un paciente después de la cirugía depende de varios factores, a saber:

  • Edad.
  • Peso inicial antes de la cirugía.
  • Condición general de salud del paciente.
  • Patologías asociadas.
  • Tipo de cirugía.
  • Capacidad del paciente para hacer ejercicio.
  • Cumplimiento de las instrucciones sobre la dieta y otros cuidados de seguimiento.
  • Motivación del paciente y la cooperación de su familia.

 

¿Cuáles procedimientos quirúrgicos para reducir la obesidad hay?

Pueden agruparse actualmente en tres tipos:

La teoría es sencilla. Cuando uno siente que ha comido suficiente, es muy probable que disminuya su sensación de hambre y ya no le apetezca comer más. El resultado es que quizás coma menos.

  1. Procedimientos restrictivos que disminuyen la ingesta de alimentos.
    • La cirugía restrictiva de reducción de peso reduce la cantidad de comida consumida en una misma ocasión. Sin embargo, no interfiere con la absorción normal (o digestión) de la comida.
    • En un procedimiento restrictivo, el cirujano crea una bolsa gástrica más pequeña en la parte superior del estómago. La bolsa, con una capacidad de aproximadamente de 15 a 30 ml, está unida al resto del estómago a través de un orificio de salida conocido como “estoma”. Si se cuenta con un paciente colaborador y dócil, la capacidad reducida del estómago, junto con los cambios en su comportamiento, pueden lograr una ingesta sistemáticamente baja de calorías y una reducción de peso también sistemática.
    • Durante la recuperación, los pacientes deben observar normas estrictas relacionadas con dietas específicas y otras restricciones que les señale el cirujano. Si bien estas normas pueden variar de un cirujano a otro, es importante que el paciente siga sus instrucciones cuidadosamente.
    • Cuando llega el momento de reanudar la comida “normal”, el paciente debe saber adaptarse a una nueva manera de comer. En cada comida, el paciente se le limita a consumir aproximadamente de media a una taza completa de comida antes de sentirse incómodamente saciado.
    • Los pacientes que experimentan los mejores resultados de un procedimiento restrictivo son aquellos que aprenden a comer despacio y en cantidades menores y que evitan beber demasiados líquidos, especialmente bebidas gaseosas.
    • Si el paciente no cumple estas normas, puede provocar que se ensanchen la bolsa gástrica y el orificio de salida del estómago, o ambas cosas, y con esto, arruinar el objeto de la cirugía.
    • La efectividad de un procedimiento restrictivo se ve reducida por el consumo continuo de refrigerios o líquidos de alto contenido calórico y de grasas. No se logran generalmente los resultados esperados de reducción de peso si el paciente deja de cumplir las modificaciones dietéticas y conductuales recomendadas, tales como hacer más ejercicio y la asistencia regular a reuniones con el grupo de apoyo.
  2. Procedimientos de mala absorción para alterar la digestión.
    Los procedimientos de mala absorción y/o restrictivos han producido un incremento general de la reducción del sobrepeso. Sin embargo, algunos de los métodos restrictivos, como los antes descritos, no siempre logran la reducción del sobrepeso esperada tanto por los cirujanos como los pacientes.
    • Por esta razón, se desarrollaron procedimientos para alterar la digestión, conocidos como procedimientos de mala absorción, para que obraran junto con los métodos restrictivos.
    • Estas técnicas implican una derivación del intestino delgado, con el fin de limitar de esta forma la absorción de calorías.
    • El riesgo de complicaciones y efectos colaterales aumentan, en general,  si se alarga la derivación del intestino delgado. Entre el cirujano y su paciente deben determinar los riesgos y beneficios para su vida diaria del tipo de cirugía de reducción de peso escogido.
  3. Procedimientos mixtos. Es decir, el que reúne la cirugía restrictiva con el método de mala absorción.

     

¿Cuándo una cirugía bariátrica es exitosa?

En general,  se define como éxito una cirugía cuando reduce un 50% o más del sobrepeso corporal y el paciente mantiene este nivel por lo menos por cinco años.

Los resultados lógicamente pueden variar según cada uno de los diferentes procedimientos, así como también pueden cambiar según cada cirujano. Es importante al tomar la decisión de operarse conocer la experiencia y los índices de resultados del cirujano elegido.

 

¿Hay resultados  disponibles sobre el procedimiento quirúrgico?

La mayoría de los estudios concluyen que los pacientes:

  • Pierden peso rápidamente y continúan haciéndolo hasta entre 18 y 24 meses después del procedimiento.
  • En los seis primeros meses, los pacientes pueden perder entre 30% y 50% de su exceso de peso.
  • En algunos casos superar el 70% del exceso de peso a los 12 meses después de la cirugía.
  • Seguimientos más prolongados demuestran que los pacientes pueden mantener una reducción del sobrepeso del 50% al 60% entre los 10 y los 14 años posteriores a la cirugía.
  • Los pacientes con IMC iniciales más altos tienden a perder más peso en general.  Aquéllos con IMC iniciales más bajos pierden un porcentajes mayor de su sobrepeso y probablemente se aproximen más a su peso corporal ideal.

 

¿Hay beneficios adicionales?

Se ha encontrado que la cirugía es eficaz en el mejoramiento y control de muchas condiciones de salud relacionadas con la obesidad. Un estudio de 500 pacientes realizado en el año 2000 mostró que 96% de ciertas condiciones de salud asociadas como apnea de sueño, lumbago, hipertensión sanguínea, diabetes y depresión mejoraron o se resolvieron.

 

¿Hay beneficios específicos para pacientes con diabetes?

Aunque muchos pacientes con diabetes tipo 2 mostraron una menor reducción global de sobrepeso, resolvieron de modo excelente su condición diabética, al punto que muchos de ellos dejaron los fármacos.