Cuidados Post-Quirúrgicos

 

Hospitalización

La hospitalización, en la mayoría de los casos,  es de aproximadamente cuatro a siete días después de una cirugía abierta y de dos a cinco días después de un procedimiento laparoscópico.

 En general el paciente es dado de alta cuando:

  1. Pueda tomar suficientes líquidos y nutrientes por vía oral para prevenir la deshidratación.
  2. No tenga fiebre.
  3. Tenga un adecuado control del dolor con medicamentos.
  4. No tenga complicaciones

 Durante la hospitalización se toman las siguientes medidas de prevención:

  • Según el procedimiento realizado, se pueden colocar uno o dos tubos pequeños alrededor de la bolsa gástrica y la derivación del estómago para drenar los líquidos corporales después de la cirugía. Por lo general, se retiran en el curso de tres días.
  • Para ayudar a evitar la formación de coágulos, le colocarán medias antiembólicas en la piernas u otros dispositivos de compresión.
  • El cirujano solicitará al paciente que intente ponerse de pie y caminar lo más posible, normalmente dentro de las primeras 24 horas del postoperatorio.
  • Dependiendo de su condición médica, el paciente podrá ser enviado a la Unidad de Cuidados Intensivos para supervisar su actividad cardíaca y pulmonar.
  • De acuerdo con el hospital, se les puede pedir a los pacientes que normalmente utilizan Presión Continua Positiva de la Vía Aérea (PCPVA) o Presión Binivel Positiva de la Vía Aérea (PBPVA) para la apnea obstructiva del sueño, que traiga sus aparatos consigo para emplearlos inmediatamente después de la operación.

 

Dieta

  • La modificaciones efectuadas al tracto gastrointestinal requieren cambios permanentes en los hábitos alimentarios de los pacientes, para que la reducción de peso tenga éxito.
  • Las instrucciones dietéticas post-quirúrgicas varían según cada cirujano. Es posible que usted sepa de otros pacientes a quienes se les imparten instrucciones diferentes que deban seguir luego de su tratamiento quirúrgico de la obesidad.
  • No todos los cirujanos realizan exactamente el mismo procedimiento quirúrgico de reducción de peso y las instrucciones sobre dietas difieren según cada cirujano y cada tipo de procedimiento.
  • Es importante ceñirse estrictamente a las recomendaciones del cirujano. Las siguientes constituyen algunas de las instrucciones sobre dietas generalmente aceptadas que puede encontrar un paciente de cirugía de reducción de peso:
  • Cuando empiece a consumir sólidos es esencial que mastique muy bien. No podrá comer bistec ni otros trozos de carne si no están bien triturados y masticados completamente.
  • No beba líquidos junto con la comida, le harán sentirse saciado antes de haber consumido suficiente comida.
  • Evite comer postres y otros alimentos azucarados cuando el azúcar aparezca como uno de los tres primeros ingredientes de los mismos.
  • Evite las bebidas gaseosas, suplementos nutritivos de alto contenido calórico, batidos de leche, comidas altas en grasas y alimentos de alto contenido de fibras.
  • Evite las bebidas alcohólicas.
  • Limite el consumo de refrigerios entre comidas.

 

Regreso al Trabajo

  • La capacidad para reanudar la actividad laboral después del procedimiento quirúrgico depende de las condiciones físicas del paciente, el tipo de trabajo y el tipo de cirugía de reducción de peso a que se fue sometido.
  • Muchos pacientes retornan en promedio en el período de cuatro a seis semanas posteriores al procedimiento.
  • Sin embargo los pacientes a los que se les ha practicado un procedimiento laparoscópico pueden volver a sus actividades normales en promedio en dos semanas o antes.

 

Control del Embarazo

  • Se aconseja no embarazarse durante los dos primeros años del procedimiento. Los cambios anatómicos y fisiológicos que se producen durante el embarazo y la potencial posibilidad de lesión fetal hacen recomendable abstenerse de embarazarse durante este período.

 

Seguimiento a largo plazo

  • Los efectos a corto plazo del tratamiento quirúrgico de la obesidad se entienden bien, pero hay todavía cuestiones referentes a sus efectos a largo plazo en los sistemas nutritivos y corporales que necesitan respuestas. Se tendrán que estudiar las deficiencias nutritivas que ocurran en el curso de muchos años.
  • Con el tiempo, usted necesitará chequeos periódicos de anemia (bajo contenido de hemoglobina en la sangre) y vitamina B12, así como de niveles de folato y hierro. Inicialmente se practicarán pruebas de seguimiento de cada tres a seis meses, o con mayor frecuencia si se requiere y después de cada uno a dos años.

 

Grupos de Apoyo

  • El uso extendido de grupos de apoyo ha proporcionado a los pacientes que han recibido un tratamiento quirúrgico de la obesidad una excelente oportunidad de compartir con otras personas sus diversos problemas personales y profesionales.
  • Esta cirugía no resuelve inmediatamente los problemas emocionales existentes ni sana los años de lesiones que la obesidad mórbida pueda haber infligido al bienestar emocional del paciente.
  • La mayoría de los cirujanos conforman grupos de apoyo para ayudar al paciente a usted en problemas y necesidades a corto y a largo plazo. La mayor parte de los cirujanos bariátricos que realizan frecuentes cirugías de reducción de peso le confirmarán que un apoyo posquirúrgico continuado ayuda a producir el mayor grado de éxito en sus pacientes.